Coronación

Si esta candidatura consigue la confianza de los Hermanos, se iniciarán los trámites de solicitar la coronación canónica de María Santísima de la Esperanza en la Catedral de Santa María, a la que se trasladaría en procesión Extraordinaria para la celebración allí de un Triduo y besamanos para su posterior regreso, también en procesión, a San Juan. Si no fuera posible acceder con su palio a la concatedral tras realizar las mediciones pertinentes, iría sin el pero en su paso de plata.

Para poder coronar a nuestra Madre, iniciaremos un proceso desde el primer día en el que trataremos de engrandecer y justificar esta coronación a través del cumplimiento de los fines de la Hermandad.

Para ello, será necesario que las actividades de caridad, culto, formación y evangelización que describimos en esta candidatura adquieran toda su dimensión y consigan mover a muchísimas personas y que nuestra Madre de la Esperanza, quien siempre es nuestra intercesora ante el Padre, sea quien nos guíe en este camino, haciendo que la devoción por Ella y por Cristo, sea aun mayor y sirva también para que crezca la fe de todos los que nos rodean.